El proyecto Oryzonte demuestra que las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por el cultivo del arroz en Sevilla se pueden reducir en un 60%
- El proyecto, iniciado en 2018, tiene como objetivo mejorar la sostenibilidad del cultivo de arroz en la provincia de Sevilla, donde se encuentra la mayor superficie de cultivo de arroz de España.
- El proyecto promovido por Mars Food y Herba Ricemills en colaboración con Danone se centra en tres áreas clave: agua, emisiones de gases de efecto invernadero y biodiversidad.
Madrid, 19 de octubre de 2022. El proyecto de Agricultura Sostenible ORYZONTE (https://www.oryzonte.com/) ha demostrado que la aplicación de técnicas de riego intermitente (Alternate Wetting and Drying, AWD) permite reducir en un 60% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) producidas por el cultivo del arroz en Sevilla.
El programa, financiado íntegramente por las compañías Mars Food, Herba Ricemills (Ebro Foods) y Danone en el marco de su compromiso empresarial con la sostenibilidad de su cadena de valor y la mitigación del cambio climático, persigue mejorar la sostenibilidad del cultivo arrocero de Sevilla en tres áreas clave: agua, emisiones de gases de efecto invernadero y biodiversidad, habiendo obtenido resultados muy satisfactorios en cada una de ellas. Dentro del proyecto, como acción transversal, se han incluido también actividades de formación con los productores de arroz de la región.
El primer estudio de muestreo directo de GEI en el arrozal sevillano
Los campos de arroz de Sevilla, como los de muchas otras regiones, se cultivan en condiciones de inundación, por lo que son una fuente importante de emisiones antropogénicas de gases de efecto invernadero, siendo el metano (CH4) el gas predominante en este cultivo.
Aunque las emisiones se pueden estimar a través de modelos existentes, la precisión de estos modelos debe evaluarse mediante el muestreo directo de las emisiones de los campos de arroz. Sin embargo, hasta el día de hoy, no se había reportado ningún muestreo de emisiones de GEI en fincas de arroz comerciales en Sevilla.
En este contexto, ORYZONTE ha muestreado y analizado las emisiones de gases de efecto invernadero de 3 parcelas, tanto en la fase de cultivo como durante la temporada de barbecho invernal, aplicando en cada uno de ellos un escenario diferente de gestión del agua. La monitorización abarcó el período de junio de 2019 a junio de 2020.
La primera parcela implementó el riego intermitente (AWD), una práctica que tiene como objetivo realizar períodos de aireación del suelo durante el ciclo de cultivo. La segunda parcela implementó la no-inundación invernal, una práctica que se enfoca en no inundar los campos después de la cosecha, aumentando así el período de oxigenación de los suelos. Finalmente, la tercera parcela se utilizó como control, para obtener la línea base y verificar si las prácticas aplicadas permiten reducir efectivamente las emisiones de GEI.
Las muestras de gas fueron recogidas por el equipo del proyecto, formado por personal de las empresas Gabinete de Iniciativas Europeas y Optiriego Consulting. El equipo también contó con el apoyo técnico del Instituto Hispánico del Arroz (Hisparroz), uno de los mayores productores de la zona. El análisis de las muestras y de los resultados ha sido realizado por el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA), Centro de Investigación con una importante experiencia en la evaluación de las emisiones de GEI de los arrozales.
Unos resultados muy significativos
Por un lado, las emisiones de GEI en la parcela control fueron sustancialmente inferiores a las reportadas en otras regiones españolas, lo que podría deberse a los altos contenidos en arcilla y sulfatos de los suelos de Sevilla. Por otro, el trabajo ha permitido comprobar que la aplicación de prácticas específicas de mitigación promovidas a nivel internacional, como el riego intermitente, reducen efectivamente las emisiones de GEI de los arrozales en Sevilla. En este sentido, a través de la implementación del AWD, el proyecto ha medido una reducción de las emisiones de GEI del 60% y una notable reducción de emisiones de metano del 63%, con respecto a la práctica habitual de los agricultores[1].
De manera similar, la medición de emisiones ha demostrado que la práctica de no-inundación invernal reduce significativamente las emisiones de GEI en comparación con la práctica habitual, que supone mantener los campos inundados desde la cosecha hasta mediados de enero.
En todos los casos, las emisiones de otros gases de efecto invernadero (principalmente, el óxido nitroso) no fueron significativas. Por lo tanto, el potencial de calentamiento global se reduce significativamente con la implementación del riego intermitente y de la no-inundación invernal.
En estos momentos, el proyecto está trabajando con los productores de arroz de la región para fomentar la implementación de estas prácticas en sus fincas.
[1] Las emisiones de metano en el campo de referencia fueron sustancialmente inferiores a las reportadas para otras regiones españolas, lo que podría deberse a los altos contenidos en arcilla y en sulfatos de los suelos de Sevilla.